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El mantenimiento de las bicis es, quizás, el aspecto que más preocupación genera en los ciclistas en general, ya que siempre quieren que su bicicleta esté en perfectas condiciones. Hacerle una revisión a tu bicicleta es primordial para verificar su estatus y el de cada uno de sus componentes. Es cierto que con siguiendo una serie de consejos para cuidar las bicicletas desde casa, las bicis pueden extender su buen estado y mantener su rendimiento por un tiempo un poco más largo, pero esto no exime que cada cierto tiempo, una visita al taller de bicicletas sea necesaria.
Revisión y mantenimiento de las bicicletas: Tiempo y frecuencia
Responder la pregunta de con cuánta frecuencia se le debe hacer revisión a tu bicicleta es un tanto complejo, pues muchos factores entran en juego, desde el uso que se les da a las bicis, sean utilizadas para andar en las ciudades o para practicar alguna disciplina del ciclismo como el MTB, hasta el rendimiento individual de cada uno de sus componentes. Al hablar de tiempo, hay unos estimados de visitas al taller de bicicletas para que estas puedan mantener su buen estado y buenas condiciones.
Hacerle revisión a tu bicicleta es algo que se recomienda que se haga en los siguientes periodos de tiempo:
Un mes después de comprarla
La primera revisión de bicicleta debería ser al mes después de comprarla, al mes de uso. Esta revisión será una de las más importantes porque con ella se pueden descartar los errores de fábrica que la bici pueda estar presentando.
Por lo general, esta primera revisión se hace en el mismo lugar donde se compró la bicicleta. No solo para que los trabajadores de allí tengan una noción del estado de las bicicletas que venden, sino también para poder establecer cualquier reclamo pasada la revisión, pues, si las bicis no salen de la tienda en buen estado, los mecánicos de allí deberían responder por las fallas que estas presenten.
Antes de cumplir los seis meses de comprada
La intención de esta revisión es verificar que el uso que el ciclista le está dando a su bicicleta no sea muy rudo para la misma, y si bien el caso es aplicable para los ciclistas de ciudad, esta revisión es fundamental para los ciclistas extremos, para los que practican MTB y también BMX.
Estas disciplinas son intensas, por lo que las bicicletas deben tener la resistencia necesaria para aguantar el trajín de estas prácticas. La revisión de los seis meses también es la indicada para hacer los cambios que las personas crean necesarios en sus bicicletas, ya que conocen su rendimiento y pueden decidir si quieren agregarle mejoras o no.
Al cumplir un año después de comprarla
Si a la bici se le hizo algún cambio en la visita al taller de bicicletas de los seis meses, la revisión del año después de comprarla es la que comprueba que estos cambios fueron adecuados, tanto para la bicicleta en sí como para los ciclistas, porque la comodidad de estos siempre es lo más importante. Al hacerle una revisión a tu bicicleta un año después de comprarla, siempre se recomienda vocalizar las expectativas que se quieren de las bicis a largo plazo, pues la próxima vez que se visite al taller de bicicleta será entre los 3 y los 5 años.
Cualquier momento entre los 3 y los 5 años de comprada la bicicleta
Vale la pena comentar que a partir de la revisión después de un año de adquirida la bicicleta, las siguientes pueden ser determinadas por el tiempo o la constancia de uso o por las molestias o preocupaciones que se puedan notar al momento de andar en bici.
Se dice que el tiempo de vida de las bicicletas es de unos seis años, pero con los cuidados necesarios, este tiempo puede extenderse. Sin embargo, este es el principal motivo de las revisiones entre los 3 y los 5 años después de comprar la bicicleta.
El desgaste de las piezas sí es algo que ocurre gracias a la frecuencia de uso de las bicis, así que esta revisión permite saber cuáles de los componentes o cuáles de las piezas de las bicicletas necesitan un cambio o sustitución, así como también verificar que todos sus sistemas estén en buen estado y no requieran de una reparación.
Anterior a cualquier evento importante para el ciclista
Antes de lanzarse a la aventura de anotarse en una competencia de ciclismo, en un triatlón o simplemente antes de hacer un recorrido importante en bicicleta, es recomendable acudir al taller de bicis para descartar cualquier problema que cause un contratiempo a la hora de participar en estos eventos.
Sin embargo, el tiempo no es la única medida que se puede utilizar para saber cuándo es necesario hacerle una revisión a tu bicicleta, sino que también puede ser por la frecuencia de uso. En este caso, aplica lo mencionado un poco más arriba: los componentes y las piezas de las bicicletas de desgastan, pero cada uno lo hace con estimados diferentes.
- Cambio de cadena – entre los 1.500 y los 2.000 kilómetros recorridos. La cadena se estira con el paso del tiempo y el kilometraje recorrido.
- Cambio de casete y plato – entre los 4.000 y los 6.000 kilómetros. Son más resistentes que las cadenas, pero pueden comenzar a oxidarse y a corroerse después de muchos recorridos.
- Cambio de pastillas de frenos – Una o dos veces al año. La fricción que crea con las ruedas les resta eficacia.
- Cambio de cables y fundas – Una vez al año.
- Purgado de freno – Una vez al año. Es importante verificar que los frenos funcionen a la perfección y que ninguno tienda a engarrotarse.
- Revisión de horquilla de suspensión y revisión de amortiguador – Una vez al año. Podría aumentar en el caso de practicar BMX o MTB.
A pesar del nivel de atención que cada ciclista pueda ponerle al cuidado de su bici, es probable que siempre haya algún inconveniente que es preferible tratar desde su raíz. La revisión de tu bicicleta asegurará el buen estado de la misma, permitiendo que puedas disfrutar de su uso por un tiempo más prolongado.
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